La organización señala que 200 mil preservativos serían repartidos en el país
Señala que Hacienda, la SE y la Cofepris ponen las barreras de entrada a los insumos
Una ineficiente regulación en materia aduanal y burocrática, así como el requisito de cumplir con normas adicionales de salubridad, frenaron la entrada de al menos 200 mil condones a México que serían repartidos gratuitamente por la organización AIDS Healthcare Foundation (AHF) para combatir el virus del VIH-Sida en el país.Debido a estas barreras, los preservativos se canalizaron a otras partes del mundo, principalmente a Sudáfrica, luego que esa nación ofreció las facilidades para la entrada de los condones, dado que considera como una emergencia sanitaria la propagación del virus de la Inmunodeficiencia Humana.Jorge Saavedra, jefe de Asuntos Globales de AHF, señaló que además de la negativa mexicana a la entrada de esos profilácticos al país, que hubieran sido un millón, la organización también tuvo que esperar más de dos meses el permiso de las autoridades para introducir unas mil pruebas de detección del VIH, ya que según el gobierno federal, éstos productos deben cumplir con otras normas de salud.“Si bien en otros países los distribuimos sin problemas, en México hay muchas barreras y procedimientos burocráticos, por lo que meter un nuevo condón se vuelve muy complicado. Siendo México un país con crisis económica, nos pone barreras a los que desde afuera queremos ayudarlo, esta es una situación que el gobierno federal debe tomar en cuenta y más si esos productos están avalados por la OMS”.Detalló que son las autoridades de la Secretaría de Hacienda, de Economía y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) quienes ponen las barreras a la entrada de esos insumos.“La Cofepris y las autoridades de Hacienda y de Economía son quienes ponen las trabas, y los registros de la Cofepris simplemente invalidan el que México crea que una certificación de la OMS es válida, así, complica mucho el que una organización quiera apoyar a México donando insumos sanitarios. Son ellos quienes ponen las barreras”, comentó.“La situación del Sida debe considerarse como una emergencia y el gobierno federal debe dar las facilidades cuando organismos quieran hacer donaciones”, agregó el ex director del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/sida (Censida). Por estas razones, explicó, los condones fueron enviados a Sudáfrica, “país que no está lejos de México económicamente hablando y cómo puede ser que allá sí los reciban bien”.Desconoció si en México por un eventual monopolio del mercado existe un interés de frenar la entrada de preservativos por parte de alguna de las dos principales fabricantes de condones afincadas en el país.“No sabría decirlo, pero por supuesto que habrá intereses, no sólo se trata de condones, sino de muchos productos de salud pública, dado que en México requieren de una doble certificación”Al respecto de la comercialización de condones, ejemplificó que en México es tres veces más caro comprarlos por volumen, pues en el mercado internacional un condón comprado al mayoreo cuesta 40 centavos mexicanos, contra el casi 1.50 pesos que costaría el adquirirlos en territorio nacional.En el marco del lanzamiento de la campaña Love Condoms, en la que colaboró el gobierno de la ciudad, expuso que la AHF ya hizo llegar al titular de la Secretaría de Salud, José Ángel Córdoba Villalobos, lo ocurrido y al que pidió su intervención en el tema, pues de seguir así, pareciera que México manda un doble mensaje al mundo.“Esto que se traduce en que México no reconoce una certificaron de la Organización Mundial de la Salud y en que pareciera que manda un doble discurso”, concluyó. (Nicolás Lucas/Finsat/MCH) México, D.F. (El Financiero)
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